México, 13 feb (Prensa Latina) El gobierno del presidente Joe Biden inició el desmantelamiento del programa migratorio de Donald Trump Quédate en México, que anuló el derecho de asilo a miles de solicitantes, informó hoy La Jornada.
Se trató de una política estadounidense repudiada por la mayoría de los mexicanos y aceptada entonces por el gobierno como parte de las negociaciones para evitar sanciones comerciales y financieras, incluidos impuestos extra de un 25 por ciento a todas las importaciones mexicanas.
La medida de fuerza afectó a todos los aspirantes a asilo para ingresar a territorio estadounidense a través de México, quienes no pudieron lograr su propósito de hacerlo por la vía legal con garantías de respeto a sus derechos humanos, incluido el de trabajar sin persecución ni explotación.
La Jornada señala que a los detenidos bajo ese programa les será permitido ingresar de manera paulatina a Estados Unidos para el procesamiento de sus casos.
Agrega que de esa forma Biden busca cumplir con su promesa de revertir las políticas antimigrantes del gobierno de Trump, entre ellas renovar programas de protección de deportación y legalización temporal de migrantes que llegaron como menores de edad conocido por la sigla DACA, y reunificar a niños separados de sus padres.
A partir del 19 de febrero se permitirá el ingreso en fases de unos 25 mil solicitantes de asilo con casos activos a Estados Unidos, lo que estará limitado al procesamiento de unos 600 por día en dos cruces fronterizos por designarse, explica el diario.
En total, unos 70 mil inmigrantes estaban registrados en el programa de Trump inaugurado en enero de 2019 que oficialmente se llamaba Protocolos de Protección Migrante el cual fue suspendido por el mandatario demócrata en su primer día en la Casa Blanca.
No obstante, el gobierno de Estados Unidos advirtió que el cambio de ésta y otras políticas migratorias tomará tiempo y pidió paciencia, algo de lo que precisamente ayer en su conferencia matutina alertó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.